Nos invitaron este fin de semana largo a C. Cortéz y a mí (con flías. incluídas) la gente de Malabaricus Fly-fishing (Kito del Foro entre otros) .
Finalmente logramos coordinar y allí fuimos todos.
Carlos con su mujer y dos hijos (9 y 13 años).
Yo con mi mujer y dos hijas-bebes (3 y 1 años).

La intención era pasar un momento de distensión en ese paraíso, disfrutar la flia y amigos y de paso, si se podía (y se pudo) pescar algo.

Si bien el lugar es nuevo (pocos años), y pensado originalmente para cazadores de plumas (lo sigue siendo) se adaptó perfectamente al mosquero y a su flia.

Los cazadores mayormente van de marzo a octubre, y de nov a marzo es ideal para los pescadores por las especies posibles: doradillos y taruchas.

Un viaje espectacular de familia, amigos, y algo de pesca.

El lugar:
Me remito a la pagina web para que vean las instalaciones. Estancia Ninette - Lodge Caza y Pesca

Está sobre una barranca sobre el mismísimo Río Negro donde pescan el dorado. A sólo 100 mts se embarca para pescar.

Me resultó un Lodge extremadamente cómodo.
Incluso con un wading-room donde dejamos todos los pertrechos de pesca y no molestamos en el cuarto familiar con cañas, waders, moscas, etc.
Además sirve para cuando nos rajamos temprano a pescar, y así no despertamos a nuestra mujer que aun permanecerá dormida.
Dos livings: uno mas formal y señorial con una barra cargada con todo tipo de bebidas, y otro mas distendido con parrilla grande interna, Plasma de muchas pulgadas, y demás cosas de divertimento.

Todas las habitaciones tienen una excelente vista al Río Negro y baño individual. Sin suntuosos lujos cumplen con lo mínimo y más, no sólo para el hombre pescador sino para la mujer citadina que se aloje.

En general no es un lugar muy cargado de gente, sino mas bien de poca gente.
Nosotros estuvimos casi solos, salvo por un grupo de 4/5 yankies que estuvieron cazando un día y medio.
(los dos living´s hacen que si los grupos no son homogénos, cada cual pueda disponer de uno como si fuese propio).

Las comidas fueron sencillamente espectaculares. Eso solo vale el viaje.
La cocción a cargo de una cocinera experimentada es a base de carnes asadas, pato, liebres, palomas y pastas caseras.
Los postres todos caseros fueron ancestrales, destacándose la mousse de frutillas, el helado con vainillas y la “natailla”, y ello sin desmerecer la ensalada de frutas natural y el flan casero, ese que viene con los bordes amarronados y agujereados como queso y con el centro amarillo color huevo plastificado por una membrana de caramelo.

Previo a ello picadas en esos livings, de buenos chorizos y quesos fundidos, acompañados de cerveza, Champaña, agua o gaseosa (además de poder servirse quien quisiese en la barra, wiskies, aníes, Gin, etc.).
Todo ello siempre mirando el río ya que el Lodge al estar elevado (sobre una barranca de varios metros) permite una vista panorámica de todos lados y del río.


La atención :
Lo pongo como capitulo aparte.
De las estancias y Lodge que he hestado en mi vida, pocas (ninguna?) vez fui atendido como en esta.
Recuerden que al ir con mi mujer (nada quiere saber de pesca) y dos bebes, la cosa se podía complicar.

La atención, comenzado por el dueño de la estancia hasta el último peón, fue espectacular.
Cocinero, mucamas, guías, peones y el propio dueño nos trataron como si fuésemos sus invitados personales, de la familia, pese a que no lo éramos.
Ni que hablar de Los operadores: Kito (Esteban Rainieri) y Sebastián H, quien estaban siempre dispuestos a las charlas, a la ayuda, a la guía personalizada de pesca, a darnos los secretos; a hacernos pasar la mejor jornada. Y lo lograron.

Los precios:
No tengo el tarifario, pero basta consultar.
Por lo que sé, el día/noche allí cuesta casi lo mismo que te cobra cualquier estancia de Baires “un día de campo”. Con la gran diferencia que Ninette además incluye todas las comidas, bebidas, los botes, el combustible, las guiadas de pesca etc.

Es realmente razonable el precio por pescador (más aún el del acompañante que no pesca) en comparación de lo que cobran en cualquier otro lado por esa calidad o incluso menos.

Actividades:
Además de la pesca y la caza (todo el año se puede cazar palomas) y contemplar esas vistas desde la lomada del Lodge, se puede
- caminar por el campo o el barranco,
- visitartar el “acuario” casero con mas de mil peces que tiene el dueño,
- solicitar cabalgar,
- hacer tardes de pileta con vista sin-fin, y de solarium en su lengua de deck de madera.
- Pasear en lancha a las lenguas de arena pura sobre el río para hacer “playita”.
- Pescar en familia.

La pesca:
Allí se pueden buscar tararias y dorados a Fly o spinning.

Dorado:
Se pesca:
a) camalotenado desde el bote el Río Negro, tirando contra los palos como en el Paraná y
b) vadeando en flats de arena.

Allí (b) acecha el dorado, y con derivas controladas, en salidas de agua, y otras formas que nos enseñaron los locales, es posible esta pesca.
Algo diferente, ya que no mucho lugares se puede doradear así.
Realmente el entorno es fascinante, más para una pesca así, pese a que los dorados rondan el kilo de peso, con sorpresas que puede haber de 3 o mas kilos, pero como excepción.

Nosotros salimos poco a pescarlos y obtuvimos sólo 2 piezas, de unos 8 piques en total.
Una salida que puede hacerse por 3 horas si se quiere volver con la familia o extender la jornada por 5 o 6.
Salíamos a pescar de mañana, de 7 a 12 mas o menos, y luego regresamos al lodge con la familia.
Se descansaba al mediodía y por la tarde (16 hs mas o menos) se sale a buscar las taruchas.

Taruchas:
A éstas se las pesca en un “Tajamar” (laguna artificial sin conexión con causes naturales).
Tenía varias hectáreas el tajamar, al que no llevaron en un campo vecino (´20 minutos de camioneta).

Si bien yo había pescado taruchas a Fly, incluso hace unos años allí en Mercedes (Ur), en este lugar las pescan sobre el pasto mismo.
Las lentejuelas que flotan junto a la altísima vegetación, hacen que si uno mire desde afuera parezca una plaza de pasto (no parece que bajo ese colchón verde hubiese agua).
Había que castear allí mismo, arriba del “pasto”.
El popper venía como por una alfombra. Era similar a cuando practico en Palermo y tiro al pasto a los pajaritos. Bueno, acá es igual.
Y lo más sorprendente es que el popper era atacado “sobre el pasto” mismo (¡), saliendo la Malabaricus desde el fondo y rompiendo esa superficie verde, cual gusano gigante de película de terror que rompe la capa de la tierra y se traga a su víctima.

También picaban en claros de agua, en “ojos de agua” limpios entre esa vegetación.

Toda una técnica nueva que me costó al principio pero que luego de un par de horas de fracasos, y de cómo me mostró en vivo y directo mi guía que se pescaban, logré agarrarle la mano.

Carlos C que hizo allí su debut en Fly con ellas, tuvo una buena performance.
Claro que con las taruchas en esas condiciones es difícil hacer una estadística pero digamos que en una horas por la tarde un pescador puede recibir unos 11/20 ataques (o mas), de los cuales concretará el 30/40%.

Los portes rondan el kilo, kilo y medio de peso. Con algunos ejemplares que ellos han sacado cercanos a los 4 kilos.

Lo más emocionate allí de esta pesca, para mí, es el ataque que les digo, pues la pelea al estar tan lleno de plantas es casi inexistente. El pescado no corre y se enrrieda enseguida en el fondo (esto no sucede si las pescamos en el claro, pero hay mucho menos piques).
Los Uruguayos a veces incluso la pescan con poppers SIN anzuelo. Sólo les atrae la suba y ataque.

El que hizo la diferencia en esta pesca fue Genaro (hijo de C. Cortez).
Con su equipo de spinning movió mas taruchas que el padre y quien suscribe juntos; logrando capturar sus primeras.
Según sus propias palabras (de alguien que tiene algo de mundo pese a su corta edad) “uno de los lugares del mundo que mas me gustó!”.

Una aclaración:
hay otros lugares a los que llevan a pescar. Pero como para acceder a ellos se necesita un día completo, nosotros no pudimos hacerlo ya que debíamos alternar pesca y familia.
Pero si se puede, hay otros lugares mas alejados con mejores posibilidades, las cuales no pudimos probar.

La “balsa cubana”:
Una mañana que yo me quedé sin ir a pescar para estar haciendo familia, el dueño viendo mi cara de “¡quiero pescar algo!”, me dice :”venite, te voy a mostrar como se pesca acá”.
Mandó al “gordo” (uno de los guías) a que arme un bote para un viaje a no mas de 200 mts.

La cuestión es que al bote al final subieron: mi mujer, mi hija de 3, mi hija de 1 año, Genaro Cortés (9), el “Gordo” y yo. En un bote de sólo 4 mts. (de allí balsa cubana...)

A lo ´5 minutos de salir (estábamos anclados al lado del muelle-literal!!-) la beba larga un llanto que no dejó un dorado (ní pájaro) en 30 kms a la redonda; mi mujer a los ´10 diciendo “esto te gusta?!”, etc, etc.
La balsa cubana a pleno quería volver al muelle, salvo por Genaro C. y yo que queríamos hacer algo de pesca.
Tiramos un poco, pero no obtuvimos ningún dorado.

Fue en total una salida de .... 30 minutos (¿!); clafro que para mi mujer fueron 5 horas, para mi hija de 3 un viaje en la Kon-Tiki, y para la beba un desarraigo a su comida obligatoria que mereció tremendo llanto a bordo.
Pero en definitiva todos las pasamos fenómeno y creo que Genaro entendió un poco allí a las mujeres.....
(esto demuestra además el interés del dueño en que la pasemos bien. Siempre proponía programas para la familia o el pescador que se quedaba).

Equipos:
Dorados:
#6 a # 8.
Yo usé un equipo #6 y mas o menos me alcanzó. No es por el tamaño del pez (una 5 bastaría) sin por la mosca y tratar de colocarla en lugares justos.
Streamers, no muy grandes. Colores clásicos.

Tarucha:
Un #6 potente que aguante poppers bastará, aunque también algo más si queremos asegurar la presa arrastrando la vegetación que junta cuando tratamos de acercarla.
A mí con el #6 me bastó (eso sí, luego de que me prestaran un popper acorde).
Poppers clásicos (amarillo fue el ilustre ganador) en anzuelo fino (liviano) CON antienganche.
En señuelos la ranita fue la estrella.


Conclusión.

Un lugar extremadamente lindo, con un alojamiento acorde y gente de primera con una atención personalizada.
Buena comida y bebida, algo de pesca en lugares hermosos y donde la familia puede pasarla bien.

Y todo eso a tan solo unas horas de nuestro País, a un precio razonable para la calidad y cantidad de cosas que allí nos ofrecen, es para conocerlo.
Y de paso pueden hacer muy lindas pescas de doradillos en flats de arena y de malabaricus entre gambarrusas y pastos.

Saludos a todos.