Hace unos meses, recibí la noticia que había ganado una salida de pesca cortesia de Gianni Juncal y su operación Best Dorado Fishing. En ese momento comencé a pensar con que amigo mosquero la compartiría, pero de inmediato decidí que esta vez, sería mí viejo, mí gran héroe, con quién realizaría la salida.
Si bien mí viejo no pesca con mosca, no dudó en darme su sí para ir.
Así fue entonces que, el viernes emprendimos viaje hacia Salto, Uruguay, con las expectativas que siempre experimentamos cuando emprendemos este tipo de viajes.
Al llegar, Gianni nos recibió con una gentileza que merece ser destacada.
Luego de cenar, ya en la comoda cabaña designada, revisé una vez más los equipos y a dormir.
La mañana del sábado nos sorprendió con un clima ideal, fresco, mucho sol y nada de viento, condiciones que se mantuvieron durante todo el día.
Luego de un buen desayuno emprendimos viaje hasta el río Uruguay.
El nivel del río era alto, por lo cual, solo pudimos realizar pesca a los palos, barrancas y correderas, ya que no era posible vadear la zona de salto chico. Comenzamos, bajo los consejos y recomendaciones de Gianni, con los primeros intentos. Para alegría mía, fue mí viejo, quién empleando equipos de bait cast, consiguió la primera alegría del día. Un lindo juvenil de dorado que dio una linda pelea. Foto y al agua, a seguir con los intentos.
Conforme fue avanzando la mañana, el sol comenzó a calentar y poco a poco la condición era cada vez mejor.
Luego de algunos intentos fallidos, donde los dorados fueron más rápidos que nuestros reflejos, Gianni nos propuso realizar una pasada por costa argentina. La estructura de barranca, palos y correderas prometía mucho. Así fue que, debajo de unos palos, un dorado atacó mí mosca, logrando liberarse de esta, luego de unos saltos.
Volvimos a realizar la bajada nuevamente, y esta vez, debajo de unas ramas que daban sombra a una hermosa corredera, un hermoso dorado tomó mí mosca, dan cuenta al instante que se trataba de un hermoso ejemplar.
Minutos después, tras una digna pelea, teníamos en el copo, un hermoso trofeo de esos que tiene el río Uruguay.
Fotos y al agua, unos abrazos de felicidad y a seguir.
Luego de un excelente almuerzo y descanso, en el lodge de Gianni, encaramos la tarde. La condición del río había cambiado rotundamente, por lo cual, la pesca se puso muy difícil. Con una boga que levantó mí viejo y algunos piques perdidos, terminamos nuestra primera experiencia en el río Uruguay.
Agradezco ai viejo, mí gran súper héroe y compañero de infinitas pescas, por acompañarme y compartir esta experiencia conmigo, y a Gianni Juncal, por su gran profesionalismo y calidez con el cual nos hizo pasar un inolvidable día de pesca. Un servicio muy recomendable para quiénes deseen probar suerte en el río Uruguay.
Hasta la próxima corredera!!
