(22/02/13. Fuente: La angostura Digital). Así lo informó el Departamento Provincial de Aguas (DPA) a través de un comunicado detallando todos los lugares donde fue detectada esta especie que viene amenazando a la flora y fauna de lagos y ríos de la región.


La delegación de la zona andina del DPA indicó que las muestras de laboratorio se realizaron a mediados de enero y principios de este mes en zonas costeras del Nahuel Huapi y otros ambientes hídricos cercanos a Bariloche.
En el caso de los balnearios, se informó que el moco de roca se encontró de manera abundante en playa La Serena, en la compuerta de la reja de la planta potabilizadora de ARSA en El Bolsón (ex camping Alegría) y en los filtros de la misma planta.

También detectaron la didymosfemia geminata con menor presencia en las playas de Melipal y Puerto San Carlos. En el resto de los balnearios y tomas de las plantas potabilizadoras no se hallaron muestras del alga invasora. No obstante, se informó que se seguirán realizando muestreos para ver de qué manera evoluciona este organismo tan complejo en toda la región.

Por primera vez tal como lo adelantó este diario, a principios de febrero, investigadores del Instituto de Investigaciones en Biodiversidad y Medio Ambiente (Iniobioma) del Conicet-UNCo descubrieron el alga en las costas del Nahuel Huapi, en Bariloche.

En ese momento, se informó que por primera vez en el país se hacía un descubrimiento de este tipo en un lago. Según datos del CEAN, en la provincia de Neuquén se detectó en noviembre de 2011 por primera vez el moco de roca en ambientes de la cuenca del río Collón Cura. Se estableció su distribución sobre el río Chimehuín (cerro Los Pinos) desde la zona de su confluencia con el río Quilquihue hasta la confluencia con el río Collón Cura. Para este último, desde la zona de la Confluencia hasta unos 30 kilómetros aguas abajo. Estudios más recientes indicaron que amplió el área de distribución en la cuenca, no sólo en los ríos previamente afectados sino que también se detectó en el río Malleo. También sobre el río Collón Cura, en la Rinconada.

“Lo que se ha visto en algunos casos es que tuvo un desarrollo explosivo y la dinámica fue que tapizó todas las piedras y el fondo del río. Así, desplaza a especies como larvas de insectos y caracolitos. Son muy pocas las especies de peces que comen algas. En el caso de las truchas de la zona, se alimentan de insectos y caracolitos”, explicaron los especialistas.