El efecto espejado de la cara inferior de la superficie del agua en la visión de los peces. En un artículo anterior de mi muro detallé las características de la visión binocular de los peces. En esta instancia sólo recordaremos que esa visión apunta hacia adelante y levemente hacia arriba, y que su visión plena se produce dentro de la "ventana" superior de su campo visual. El resto de la superficie del agua es un espejo que refleja el mundo subacuático, tal como podemos apreciar en la fotografía que acompaña este artículo ( tengamos en cuenta que la posición de la cámara, en este caso nos permite tener una imagen similar a la que tendría una trucha con su visión binocular, o sea, hacia adelante y levemente hacia arriba). De esta manera es que mirando ese reflejo en la cara inferior de la superficie del agua, los peces buscan la imagen reflejada de algún eventual alimento que descansa en el fondo y delante del pez.
Esta ventaja, puede ser también una desventaja cuando, por ejemplo una ninfa derive levemente debajo de la superficie, la trucha verá la ninfa real y su reflejo. Para no confundirse sólo debe esperar a que el insecto entre en la ventana de visión. Allí el espejismo desaparece.
Sin embargo si su presa huye rápidamente, la trucha, seguramente, no tendrá tiempo de esperar a que ingrese a su ventana. Ve dos peces y puede equivocarse al atacar. Justamente, el pequeño pez podrá, entonces, lanzarse hacia la superficie y saltar fuera del agua. Su perseguidor pasará de ver dos peces a ninguno!! Maravilloso....
Para evitar esto, cuando pesquemos con streamers a no más de 60 cm de la superficie, hagámoslo más lentamente. Así lograremos disminuir la posibilidad de que la trucha ataque la imagen reflejada y, efectivamente, tome nuestro engaño.
También la forma y el peso de los insectos que reposan en la superficie fuera de la ventana de visión de la trucha, trasmiten una imagen determinada.
Los insectos muy livianos que apenas deforma la tensión superficial del agua y que nosotros imitamos con moscas secas, son vistos por debajo, fuera de la ventana, como pequeños destellos de luz. Particularmente, seis reflejos, uno por pata, dispuestos, entonces en dos líneas apenas curvadas.
Los insectos más grandes y pesados. como escarabajos, hormigas, emergentes o imagos, deforman la superficie permitiéndole a la trucha distinguirlo con mayor claridad.
Esta imagen por fuera de la ventana es usada por el pez para localizar su eventual alimento, aún antes de ingrese en su campo visual superior. Cuanto más cerca de la superficie se alimenta el pez, menor es esa ventana, por lo que aumenta su área de búsqueda mirando al frente.
En este sentido, una imitación resultará óptima si además de sugerir el tamaño, forma y color adecuados, su peso incide sobre la superficie del agua como lo haría el insecto natural.


La fotografía que acompaña este artículo fue cedida generosamente por Gastón Ambrosimo, Guía Profesional de Pesca Zona Río Limay Medio, y loguista de Fly Dreamers