Fd: ¿Cómo fueron tus inicios en la pesca con mosca?
HP: Cuando cumplí 7 años mi viejo me regaló mi primer equipo de pesca. Lo recuerdo muy bien, era un equipo de spinning que se llamaba Abu Pinpel II (sueco) y mis primeras cucharitas voladoras Mepps negras con lunares amarillos. Años más tarde comencé con la mosca, con unos equipos muy económicos; y mi primera trucha pescada con esta modalidad fue en el Chimehuin con una Woolly Worm negra de cola roja.
Allá por el año 1991 rendí el examen que tomaba Parques Nacionales para acreditarse como Guía Profesional de Pesca, a lo cual me dediqué un tiempo haciendo intervalos con otros trabajos.
Fd: ¿Cómo llegó a ligarse la pintura?
HP: En cuanto a la pintura, siempre estuve muy atraído por el dibujo, de hecho en la escuela dibujaba todo el tiempo para regalarles a mis amigos. Pero allá por el año 2000, un día se me ocurre dibujar mi primera mosca y ahí comenzó todo...
Fd: ¿Qué tipo de técnicas aplicás en tus obras?
HP: Las técnicas que utilizo son óleos o acrílicos con pincel, el estilo es Realismo. Es muy importante antes de cada obra estudiar mucho a las truchas y sus entornos; y en el caso de las moscas, tener muy en cuenta la historia de la misma porque los cánones lamentablemente están cambiando mucho y se pierde mucha información, por eso pinto mucho las clásicas. En el caso de las moscas de salmón tengo a mi gran amigo Marcelo Malventano, quien me instruye con sus conocimientos.
Fd: ¿Hay algún mensaje en particular en tus obras?
HP: Sí, claro que sí, hay muchos. La pasión por la pesca y mensajes muchísimos, pero me gusta cuando los descubren los que están delante de la pintura.
Me pasó hace un tiempo cuando tuve el gustazo de que me visite Aurelio de la Pina junto a mi vecino y amigo, Coco Funes. Se pararon frente a una pintura de La Boca del Chimehuin y encontraban detalles del lugar… En esos momentos yo me hago esta reflexión: “Si estos dos <Señores de la Pesca con Mosca> se detienen un instante ante un cuadro mío y lo aprueban de esa manera, yo estoy feliz.”
Fd: ¿Cómo surgió el vínculo con José “Pepe” Navas y el reciente libro, escrito por su hija Ana María, sobre su vida?
HP: No lo conocí personalmente pero lo que sucedió es que en el año 1995 o ‘96 trabajé como guía en el Club de Pesca de Meliquina, el cual construyó Pepe con el incondicional apoyo de su señora. Ese año me di el gusto de encantarme de su historia y empecé a investigar y estudiar, ¡porque realmente era una persona apasionante!
Luego de haber pintado muchas de sus legendarias moscas, un día tuve el privilegio de conocer a su hija, Ana María Navas, que contaba con los manuscritos de su padre y estaba proyectando realizar el libro, que era el gran sueño de Pepe.
Cuando Ana me propuso ilustrar el libro me llené de orgullo, para mí fue un gran honor hacerlo.
Fd: Y a la hora de pescar con mosca por tu cuenta, ¿cuáles son tus lugares favoritos?
HP: Todos los ambientes son diferentes, todos tienen una lectura particular a la hora de pescar, pero sí tengo un amor particular por los lagos Pulmarí y Filo Hua Hum.
HP: Cuando cumplí 7 años mi viejo me regaló mi primer equipo de pesca. Lo recuerdo muy bien, era un equipo de spinning que se llamaba Abu Pinpel II (sueco) y mis primeras cucharitas voladoras Mepps negras con lunares amarillos. Años más tarde comencé con la mosca, con unos equipos muy económicos; y mi primera trucha pescada con esta modalidad fue en el Chimehuin con una Woolly Worm negra de cola roja.
Allá por el año 1991 rendí el examen que tomaba Parques Nacionales para acreditarse como Guía Profesional de Pesca, a lo cual me dediqué un tiempo haciendo intervalos con otros trabajos.
Fd: ¿Cómo llegó a ligarse la pintura?
HP: En cuanto a la pintura, siempre estuve muy atraído por el dibujo, de hecho en la escuela dibujaba todo el tiempo para regalarles a mis amigos. Pero allá por el año 2000, un día se me ocurre dibujar mi primera mosca y ahí comenzó todo...
Fd: ¿Qué tipo de técnicas aplicás en tus obras?
HP: Las técnicas que utilizo son óleos o acrílicos con pincel, el estilo es Realismo. Es muy importante antes de cada obra estudiar mucho a las truchas y sus entornos; y en el caso de las moscas, tener muy en cuenta la historia de la misma porque los cánones lamentablemente están cambiando mucho y se pierde mucha información, por eso pinto mucho las clásicas. En el caso de las moscas de salmón tengo a mi gran amigo Marcelo Malventano, quien me instruye con sus conocimientos.
Fd: ¿Hay algún mensaje en particular en tus obras?HP: Sí, claro que sí, hay muchos. La pasión por la pesca y mensajes muchísimos, pero me gusta cuando los descubren los que están delante de la pintura.
Me pasó hace un tiempo cuando tuve el gustazo de que me visite Aurelio de la Pina junto a mi vecino y amigo, Coco Funes. Se pararon frente a una pintura de La Boca del Chimehuin y encontraban detalles del lugar… En esos momentos yo me hago esta reflexión: “Si estos dos <Señores de la Pesca con Mosca> se detienen un instante ante un cuadro mío y lo aprueban de esa manera, yo estoy feliz.”
Fd: ¿Cómo surgió el vínculo con José “Pepe” Navas y el reciente libro, escrito por su hija Ana María, sobre su vida?
HP: No lo conocí personalmente pero lo que sucedió es que en el año 1995 o ‘96 trabajé como guía en el Club de Pesca de Meliquina, el cual construyó Pepe con el incondicional apoyo de su señora. Ese año me di el gusto de encantarme de su historia y empecé a investigar y estudiar, ¡porque realmente era una persona apasionante!
Luego de haber pintado muchas de sus legendarias moscas, un día tuve el privilegio de conocer a su hija, Ana María Navas, que contaba con los manuscritos de su padre y estaba proyectando realizar el libro, que era el gran sueño de Pepe.
Cuando Ana me propuso ilustrar el libro me llené de orgullo, para mí fue un gran honor hacerlo.
Fd: Y a la hora de pescar con mosca por tu cuenta, ¿cuáles son tus lugares favoritos?
HP: Todos los ambientes son diferentes, todos tienen una lectura particular a la hora de pescar, pero sí tengo un amor particular por los lagos Pulmarí y Filo Hua Hum.
