Pescando ninfas chicas en aguas bajas
Muchas veces la clave para un día glorioso es probar sitios y cosas nuevas, explorando mas allá de nuestras zonas de confort
A medida que el número de pescadores aumenta, es posible que al llegar a nuestro tramo favorito de río este ya esté ocupado y no nos quede otra opción que movernos a sitios que normalmente consideramos menos productivos.
Esto que en un principio nos parece un verdadero desastre puede convertirse en un desafío revelador si aprendemos a adaptar nuestro equipo y táctica de modo que nos permitan encontrar los peces que todo el mundo va dejando atrás.
Salir de nuestra zona de comodidad en el río es muy bueno y nos va a forzar a desarrollar un mejor balance de estrategias para adaptarnos a muy diferentes tipos de aguas, balance que al final nos convertirá en pescadores mas versátiles y completos.
La realidad que vivimos hoy es que los ríos mas famosos durante gran parte de la temporada sufren un aluvión de pescadores por lo que cuesta encontrar un sitio en los pools y correderas que lucen como en los libros de texto; sin embargo las aguas bajas y chatas permanecen libres y con muy buenas truchas para todos aquellos les pierdan el miedo aprendiendo a pescarlas un poco.
Muchos se habrán dado cuenta que aún las mejores aguas, las mas repletas de peces, se degradan rápido cuando la presión de pesca entrena a los peces. Luego de un tiempo de ser capturados una y otra vez sencillamente aprenden a evadir nuestras artes y dejan de picar.
Por castigarlos demasiado los tornamos selectivos pero no hacia los alimentos normales sino a nuestros emplumados ofrecimientos que aprenden a reconocer por una infinidad de detalles que incluyen el tipo de movimiento generado por el arrastre del leader y la línea que en muchos casos no podemos evitar.
Una vez que los peces aprenden y no hace falta que sean truchas porque los dorados en aguas claras aprenden todavía mas rápido, estos peces graduados para evadirnos o rechazan de plano nuestras moscas o lentamente se van retirando a sectores del río de aguas mas bajas, menos frecuentados por los pescadores. Una vez en estos sitios de agua generalmente baja pueden descansar, olvidar un poco y darle una chance al pescador que atento a algunos detalles, les llega sin delatarse y con los elementos y técnica correctos.
Para tener en cuenta
En las aguas bajas sin importar la velocidad del agua es donde se concentra la mayor cantidad de vida en un río y por ello es donde vemos mas vegetación y miríadas de insectos. Los peces que eligen las aguas bajas para estar lo hacen seguramente por la abundancia de comida y cuando digo aguas bajas me refiero a aguas que normalmente como máximo me llegan a las rodillas.
No todas las aguas bajas reúnen las condiciones para que los peces por ejemplo las truchas se sientan cómodas, sobre todos las aguas muy bajas de fondo completamente liso y claro, sin depresiones o estructuras que pueda darle algo de protección a la trucha de los peligros externos.
Un martín pescador cerca es suficiente para espantar a las truchas en una zona baja sin estructuras. En cambio las aguas bajas con vegetación, fondo con depresiones, rocas y maderas albergan muy buenas truchas, truchas de las cuales tomamos conciencia cuando las espantamos al caminar sin cuidado, por aguas bajas, moviéndonos de pool en pool. Cuantas veces hemos puesto en fuga truchas grandes en las aguas bajas y sin embargo que poco las pescamos.
La mismísima orilla es muy importante en las aguas bajas porque es el sitio ideal para que las truchas oculten su silueta. A veces durante el día no vemos ni una y cuando bajan la luz salen muchas de las orillas para ubicarse en aguas mas abiertas que nos dan mas posibilidades de tiro.
Pescando la orilla misma, durante el día casi siempre uso secas sobretodo cascarudos chicos o moscas de CDC que aterrizan sin asustar.
La temperatura es un detalle muy importante cuando decidimos pescar aguas bajas ya que las truchas no estarán en ellas si la temperatura no es de su agrado por ejemplo con un calor intenso.
Pero con tiempo muy frío las aguas bajas se calientan antes con el sol y muchas truchas pueden encontrar una zona de confort y alimentación en ellas. Usen el sentido común, si se enfría de golpe las truchas buscarán aguas mas profundas con temperatura mas estable, si hace demasiado calor pasa lo mismo, pero con temperaturas adecuadas el agua baja es donde se halla la mayor cantidad de comida ya sean insectos o alevinos.
Cazando truchas
En aguas bajas tenemos que ser muy cuidadosos para acercarnos a las truchas. El acercamiento es parte fundamental de la técnica de pesca que debemos pensar como algo integral donde la ropa, la forma de movernos, las distancia a las truchas, la posición que tomamos antes de lanzar, el equipo que estamos usando y la concentración mental forman un todo que interactuando con nuestro instinto nos permite llegar al mundo de la trucha de un modo natural, convincente y sin ser notados.
Las truchas de las aguas bajas están siempre en un estado de alerta roja, atentas al mínimo detalle de peligro para escapar al escondrijo mas cercano que seguramente tienen muy estudiado.
Un movimiento malo de nuestra parte, y desaparecerán dejando solo unas volutas de limo levantándose del fondo.
Ropa camuflada, leaders apropiados para no tener que usar la línea, ninfas livianas y movimientos de garza son parámetros que tenemos que empezar a dominar con la paciencia necesaria. Todo nos va a llevar mas tiempo en aguas bajas, el acercamiento hasta tomar posición, decidir como hacer entrar la ninfa al agua y donde, controlar correctamente la caña y el leader. Cualquier movimiento repentino o rápido es fácilmente detectado por las truchas y volatiliza cualquier chance de pescarlas.
Generalmente trato de ver a las truchas primero en aguas bajas pero por experiencia son muchas las que no vemos porque son artistas del camuflaje por lo que no dejo un sitio que voy a pisar sin probar unos tiros primero. Una pequeña depresión en el fondo que adivinamos porque el mismo pierde un poco de nitidez es suficiente para ocultar la silueta de una buena trucha y lo mismo pasa con cualquier piedra o tronco en el fondo donde una trucha apretada contra un lado no es tan sencilla de ver.
Ya hemos charlado de como ver a las truchas hace un tiempo, solo les recuerdo que las aletas son muy notables, especialmente la cola y las pectorales así como la línea mas oscura del lomo. Los colores se mimetizan perfectamente con lo que las rodea pero las líneas de sus siluetas especialmente las de las aletas, que además se mueven, son fáciles de notar.
Trato de mirar un largo rato con intensidad cada punto de un agua baja, sobretodo si hay estructuras presentes. Tras un rato los ojos se acostumbran y comienzan a detectar casa pequeño movimiento que no forma parte de las corrientes y plantas y solo entonces podemos intentar el lance. Los lances cortos son mas efectivos porque corremos menos riesgo de pasar el leader por encima de alguna trucha que no vimos y no piensen que un 5X que pasa sobre el lomo de una trucha no va a espantarla por eso trato de pescar dentro de un círculo que no va mas allá de los 10 metros incluyendo los 3 de la caña.
Conviene acercarnos desde atrás a las truchas buscando luego una posición de tiro de atrás y de costado para pasar por arriba la ninfa y poco tippet.
En aguas bajas vemos de inmediato como las truchas reaccionan al caer una ninfa, incluso una muy liviana. Con sus finísimos sentidos detectan la entrada de la ninfa al instante aún las que caen atrás de ellas y muchas veces se dan vuelta y van a buscarlas encontrando la mosca primero, algo que podemos explotar muy bien lanzando atrás y a los lados preferiblemente a pasarles por arriba con el leader.
Las ninfas para aguas bajas tienen que tener relación con el tipo de agua, deben hundirse pero al mismo tiempo derivar naturalmente si encajarse continuamente en el fondo por lo que en general vana a ser muy simples, pequeñas y moderadamente lastradas. Los pescadores Franceses han desarrollado este tipo de ninfas muy bien adaptándolas a sus aguas bajas y demandantes, vamos a ver que son moscas muy estilizadas en su diseño, sin patas o estructuras que puedan arruinar la silueta o entrada al agua.
Una ninfa ideal es la que entra al agua y deriva dándole tiempo a la trucha que se dio cuenta de su entrada a verla y poder tomarla en la columna de agua. Una ninfa que se va al fondo demasiado rápido es detectada pero cuando la trucha va por ella, ya está clavada en el fondo, inmóvil y mucho menos atractiva.
Las cabezas de tungsteno que funcionan muy bien en aguas mas profundas en aguas bajas no son tan convenientes y las tenemos que reemplazar por cabezas de cobre o mejor unas pocas vueltas de alambre de plomo fino.
Lo mas cerca posible
Independientemente del tipo de agua, baja o mas honda, cuanto mas cerca logremos ponernos de las truchas sin espantarlas mas chances tendremos de que algunas partes de nuestro equipo como el leader en aguas bajas o el leader y la línea en lances largos, nos jueguen totalmente en contra. En algún momento discutiremos acerca de nuestro enamoramiento por las líneas de mosca y el lance que producen, esos loops que hechizan al que comienza y que sin darnos cuenta son enemigos nuestros una vez que llegan al agua y son atrapados a merced de las múltiples corrientes.
Un leader largo, fino y con la conicidad necesaria o el diseño justo para dar vuelta las pequeñas ninfas sin necesidad de usar la línea para nada es mucho mas eficiente a corta y media distancia que un sistema de leader mas corto y línea que no podemos mantener alejados de la superficie como si lograremos con un sistema de solo un leader fino y largo directo hasta la mano.
Así como podemos formar un loop y impulsar moscas chicas con un leader corto sin que salga la punta de la línea de la caña lo mismo podemos lograr con leaders de nylon especiales de hasta 10 metros de largo que reemplazan totalmente a la línea en tiros de corta y media distancia con la enorme diferencia de que podemos mantenerlos separados de la superficie por su escasa masa y logramos posadas de ls ninfas o secas muchísimo mas delicadas.
Estos leaders muy usados en Francia y por eso se los conoce como French Leaders luego incorporan tramos de color brillante que ofician de visualizadores (sighters) para analizar a la perfección las derivas y ver los piques que no alcanzamos a sentir en la mano.
Ninfas livianas y delgadas
A’un usando un leader muy especial hay momentos en que el peso de las peque;as ninfas es insuficiente pera que podamos mantener el leader tenso sin apoyar en el agua, sencillamente el poco agarre de las ninfas o la poca corriente nos obliga a apoyar la parte final del leader en el agua. En este caso ayuda bastante engrasar esa parte del leader para que no se hunda y podamos corregirla con facilidad reposicionándola de acuerdo a la corriente. Aún esta maniobra que es un mend del leader es mucho mas sencilla y mueve menos la mosca que si estuviéramos pescando con un leader convencional y parte de la línea en el agua.
En aguas ultra delicadas engraso el visualizador que es un tramo de nylon de dos colores aproximadamente de .30 de mm de espesor. Engrasado flota bien con una ninfa pequeña y marca el pique de maravilla sin asustar como puede ocurrir con un indicador de pique normal mucho mas voluminoso.
Hay momentos en que por mas que el visualizador flote y sea de dos colores, resulta dificultoso verlo y es entonces donde es muy útil otro tipo de visualizador muy usado en los circuitos europeos conocido como muelle en España y Curly-Q en otros lares que es simplemente el mismo nylon de dos colores tratado de una manera especial para que forme un resorte de espiras bastante cerradas muy fácil de ver a distancia.
Hay muchos tutoriales acerca de la manera de fabricar los Curly-Q como me gusta llamarlos y en un rato podemos fabricar la provisión necesaria para varias temporadas. Se hacen sobre un tubito de plástico u otros materiales como madera o metal y mi consejo es tener al menos tres diámetros diferentes, uno que haremos sobre el palillo de un hisopo común, y dos diámetros mayores donde el mayor por ejemplo tiene el diámetro de un lápiz.
Otra ventaja enorme del Curly-Q es que frena a la mosca en el aire cuando lanzamos amortiguando bastante la caída lo que produce presentaciones muy delicadas. Como este tipo de sighter se estira no solo es muy sensible al pique, al mismo tiempo evita que la trucha escupa tan fácilmente la ninfa y nos permite clavar sin mayores peligros de corte cuando usamos tippets muy finos.
Un tippet muy fino es el secreto para que la ninfa se hunda y derive correctamente a una velocidad mas lenta que la superficie del agua y mas parecida a la velocidad de la capa de agua cercana al fondo.
Muchas de las ninfas que uso para aguas bajas y chatas tienen el cuerpo liso cubierto con alguna resina transparente por lo que rompen la tensión superficial con facilidad sin que haga falta demasiado peso. Habrán visto que muchas ninfas pequeñas hechas con dubbing aún con algo de lastre flotan al comienzo, por lo menos hasta que absorben agua y por esto perdemos recorrido efectivo. Las ninfas esbeltas y lisas se hunden sin problemas y luego al ser livianas derivan correctamente sin agarrarse al fondo.
Parece mentira pero este tipo de ninfas delgado y translúcido por efecto de la resina es capaz de convencer a la trucha mas recalcitrante lo que nos hace replantear muchos conceptos y prejuicios que nos dominaban al sentarnos frente a la morsa y esto me recuerda a las experiencias de Oliver Kite y sus Bare Hook nymphs que tan bien le servían en los Chalk Stream Ingleses sin importar que solo fueran un anzuelo con unas vueltas de alambre de cobre engrosando la parte delantera formando un primitivo tórax.
Terminando
Pescar en aguas bajas es el mejor modo de tener nuestras propias aguas privadas sin drenar la billetera, y recuerden que para tener éxito en las aguas bajas no solo es importante el leader, las moscas y la caña sino un todo que incluye fundamentalmente la forma en que nos acercamos a los peces y estudiamos la forma de hacerlos reaccionar antes que nos descubran.
