Pasada la sorpresa inicial ante la caída de ceniza volcánica procedente de la cadena Cordón Caulle Puyehue a partir del 4 de junio pasado, distintas organizaciones se abocaron de inmediato a la tarea de monitorear, con regular frecuencia las consecuencias que este fenómeno ocasionaba sobre el ambiente.

Distintos protocolos fueron y son aplicados continuamente en los distintos ambientes, ya sean ríos, lagos y arroyos como también en bosque y estepa con el objeto de tratar de dilucidar como se desarrollarán los procesos naturales habituales tanto en la flora como la fauna ante la presencia de la ceniza caída.

En el marco de estos muestreos, en este caso para los ambientes de pesca, el domingo 11 de septiembre se realizó una flotada “especial” en conjunto con personal de Parque Nacional Nahuel Huapi, para monitorear el estado sanitario de los salmónidos en el Río Limay, uno de los pesqueros más importantes de la región.

Para esto se habilita a dos embarcaciones y cinco pescadores a flotar desde el puente carretero a 200 metros de las nacientes del Río Limay en el Lago Nahuel Huapi, hasta el sector conocido como "El Pinar", aproximadamente unos 25 kilómetros.

De los cinco pescadores mencionados que realizaron el relevamiento, cuatro son Guías Profesionales: Francisco Rodríguez Luciano Bacci, Sebastian Tacchino y Darío Arrieta  este último Secretario de la Asociación de Guías Profesionales de Pesca del Parque Nacional Nahuel Huapi y Patagonia Norte, y como pescador invitado Marcelo Boungarzoni

Si bien el clima del día elegido no fue el óptimo, ya que toda la jornada fue con cielo cubierto, frío y lluvia, igualmente se pudo admirar la usual claridad que da nombre al Limay, cuyo cauce retiró toda la ceniza caída durante los primeros días posteriores al fenómeno geológico.

Como primer observación se destaca un aumento de algas en todo el recorrido, más evidente en los primeros tramos, las cuales no se habían registrado en tal cantidad en los muestreos de semanas atrás, estas algas de formato filamentoso y color verde claro/oscuro, pueden observarse hasta los 2 metros desde la costa, y en lugares de baja profundidad (hasta los 40 cm.), razón por la cual se incrementará el monitoreo sobre el crecimiento de esta especie.

Si bien alguna acumulación de cenizas y arena en la costa se distinguen a simple vista, en el río se observan dos zonas claramente diferenciadas:

   1) En lo lugares de marcada correntada no hay acumulación, pudiéndose ver claramente las formaciones del fondo, tal cual fuese observado en los muestreos anteriores.

   2) Zonas de remansos y corriente suave, se pudo observar a simple vista un fondo cubierto por arena con un espesor variable no superior a los 3/4 centímetros.

Si consideramos que el río no alcanzó todavía su pico máximo de crecida, es de esperar que tras la llegada de éste la corriente limpie aun más las costas.

Se llevaron a cabo también trabajos de detección de ninfas, resultando hallar cantidades interesantes inclusive en aquellos sectores ocupados por arena, pero no en los sectores cubiertos de algas. Pueden verse algunos adultos de Mayflies aislados  aunque no se observan subidas de peces alimentándose en superficie. Sí estuvieron presentes los habituales saltos y peleas característicos de las luchas territoriales en época de desove.

El muestreo de pesca dio comienzo en la zona del puente carretero donde  se capturan, luego de 15 minutos 2 ejemplares de Arco Iris muy saludables y vigorosas. Una hembra y un macho  ambos adultos maduros con pesos superiores a los 2 kilos comprobándose el estado impecable de sus branquias. Al notarse la presencia de varios ejemplares se decide abandonar el sector para no perturbarlo innecesariamente.

Continuando la flotada, aguas abajo puede observase un curso de agua saludable y en estado de recuperación avanzado. Al igual que en sus nacientes, los sectores más cercanos a la costa mantienen una capa de arena y algas filamentosas.

Cabe mencionar la transparencia de las aguas a pesar de la persistente lluvia que cae desde la noche anterior.

En cada sector que se realizan los testeos de pesca, se capturan ejemplares sanos y fuertes mayoritariamente de Arco Iris, las que ostentan las marcas características de las luchas por el desove. También se capturan varios ejemplares de menor talla que oponen una gran resistencia, esto muestra claramente lo saludable del ambiente ya que se encuentran ejemplares de todos los talles. Las truchas marrones se hicieron presentes con ejemplares en buen estado, fuertes, con sus agallas sanas y en perfecto estado.

En conclusión y de acuerdo a las observaciones realizadas en éste y los anteriores relevamientos las condiciones del río se encuentran casi normales, mostrando las especies un estado sanitario y una alimentación del todo normales, ya que en un día de pesca, y a lo largo 10 horas,  fue posible capturar entre 5 pescadores 30 truchas de diferentes tamaños (entre 50 gramos y 4 kilos), marrones y predominantemente arco iris, las que se encuentran en plena época de desove, todas en perfecto estado, muy combativas y salvajes.

Por lo dicho no hay motivos para no esperar una buena temporada de pesca 2012-2013, ya que los principales protagonistas de la misma: las truchas y el río se encuentran en estado de normalidad.

Lic. Fernando Méndez Guerrero
Encargado de Caza y Pesca Deportiva
PARQUE NACIONAL NAHUEL HUAPI 
San Martín 24- Bariloche- Río Negro (8400)