A pesar de los fuertes vientos que pronosticaban, y el barómetro bajando, decidimos realizar la flotada del Collon Cura, cuando arribamos a la orilla del rio, temprano, como a las 8am, nos encontramos con un hatch de stoneflies y las truchas comiendo, ya antes de bajar el bote desde la orilla tuvimos cuatro piques con secas, nos auguraba una jornada espectacular, decidimos emprender la flotada, y a solo veinte metros del lugar de partida, todo se apago, como si alguna mano poderosa ubiera desconectado el cable que mantenía enchufadas a las truchas y los insectos, todos habían desaparecido, y el viento comenzó a soplar para nuestro desagrado, seguimos con secas, luego probamos con ninfas a distintas profundidades, con poco éxito, el viento aumentaba....pusimos leaders largos sin cambia Ver más...A pesar de los fuertes vientos que pronosticaban, y el barómetro bajando, decidimos realizar la flotada del Collon Cura, cuando arribamos a la orilla del rio, temprano, como a las 8am, nos encontramos con un hatch de stoneflies y las truchas comiendo, ya antes de bajar el bote desde la orilla tuvimos cuatro piques con secas, nos auguraba una jornada espectacular, decidimos emprender la flotada, y a solo veinte metros del lugar de partida, todo se apago, como si alguna mano poderosa ubiera desconectado el cable que mantenía enchufadas a las truchas y los insectos, todos habían desaparecido, y el viento comenzó a soplar para nuestro desagrado, seguimos con secas, luego probamos con ninfas a distintas profundidades, con poco éxito, el viento aumentaba....pusimos leaders largos sin cambiar linea y sacamos nuestra caja de streamers, alguna que otra tímida arcoirirs...hasta que decidimos ir por lo bajo, sinktip y streamers grandes, a las correderas donde normalmente no fallan esas arcoiris fuertes y vigorosas.....para nuestra sorpresa comenzaron a salir percas, una...dos ...tres...las truchas se habían fondeado y las percas estaban activas, esto me decía que sin dudas había caído la presión, mientra el viento seguia aumentando la velocidad hasta los 40 km por hora, olas sobre la superficie y muy dificil castear, decidimos parar a almorzar y esperar un poco. Por la terde el viento nos castigaba mas y mas, casi imposible mantener el bote, y gracias a que los tripulantes son grandes casteadores, le dimos batalla y salieron las grandes, con mucho esfuerzo, pero con una gran recompensa.
